Diario Hoy (La Plata)
noviembre 5, 2005

Duro discruso de Kirchner contra los EEUU y el FMI

El presidente aseguró esta tarde que las políticas propiciadas por los gobiernos de los Estados Unidos provocaron "miseria, pobreza e inestabilidad democrática" en la región e instó a su gobierno a que ejerza "un liderazgo responsable" en el continente.

El presidente Néstor Kirchner dirigió hoy fuertes críticas al rol de los organismos internacionales y del gobierno de los Estados Unidos en los desequilibrios económicos y sociales en la región y advirtió que la integración americana debe "reconocer diversidades".

Kirchner formuló estos conceptos al hablar esta tarde ante los mandatarios de 33 países que participaron en la apertura de la IV Cumbre de las Américas que se desarrolla en Mar del Plata.

El jefe de Estado argentino pronunció un discurso de fuerte tono crítico que personalizó en el rol que tuvo el Fondo Monetario Internacional en las crisis económicas en el continente, y en el gobierno de los Estados Unidos que provocó "miseria, pobreza e inestabilidad democrática" y le pidió un "ejercicio responsable de su liderazgo".

La posición del mandatario argentino se produjo en el marco del desarrollo de las deliberaciones para acordar la declaración final de la Cumbre de las Américas, con diferencias sobre la conveniencia de regular el paso hacia la conformación de la Asociación de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que impulsa el gobierno de los Estados Unidos.

"No nos servirá cualquier integración, sino aquella que reconozca las diversidades. Un acuerdo no puede ser un camino de una sola vía, de prosperidad en una sola dirección", remarcó Kirchner y pidió que un futuro acuerdo de integración "contemple salvaguardas y compensaciones para las naciones que sufren atrasos".

Kirchner marcó con fuerza la posición de la Argentina en la integración regional y ratificó la pertenencia "al Mercosur y a la comunidad sudamericana" como los ejes "primordiales", durante un discurso de media hora, pronunciado en el Teatro Auditorium del Hotel Provincial, donde lo escucharon los 33 mandatario presentes en las deliberaciones.

"Igual tratamiento para los diferentes, entre países poderosos y débiles, entre economías altamente desarolladas y emergentes es una mentira y resulta una trampa mortal, que también termina llegando a los poderosos", remarcó Kirchner

Mientras se desarrollaban los discursos de apertura de la Cumbre, a diez cuadras del Hotel Provincial, se desencadenaron incidentes provocados por un grupo de activistas -identificados con el grupo Quebracho- que provocaron roturas en varios edificios comerciales y determinaron la intervención de la policía bonaerense para alejarlos de la zona.

En el interior del Hotel Provincial, en tanto, el eje convocante de la Cumbre vinculado con la generación de empleo para combatir las desigualdades y la pobreza, fue el disparador de los principales discursos de apertura que se reflejaron con diferente intensidad y destinatarios más o menos explícitos.

Antes que Kirchner, se pronunciaron el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Moreno; el primer ministro de Canadá, Paul Martin, y el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el chileno José Miguel Insulza.

En ese contexto, el discurso de Kirchner fue contundente al cuestionar al Fondo Monetario Internacional (FMI) a quien le atribuyó un "ejercicio perverso" de poner obstáculos a la refinanciación de la deuda porque la Argentina no acepta "las condicionalidades, las mismas políticas que llevaron al default".

El segundo destinatario explícito de los cuestionamientos de Kirchner fue el gobierno de los Estados Unidos -con el presidente George W. Bush sentado a pocos metros, en el estrado de presidentes- cuando advirtió que desde ese país se avalaron políticas que provocaron "miseria, pobreza e inestabilidad democrática" en la región.

"El ejercicio responsable del liderazgo de Estados Unidos en relación a la región debe considerar que las políticas que se aplicaron provocaron miseria y pobreza y agregaron inestabilidad y la caída de gobiernos democráticamente elegidos", sostuvo el mandatario argentino.

También cargó contra las recetas aplicadas a partir del denominado "Consenso de Washington" y enfatizó que la Argentina es una muestra "trágica" de las consecuencias negativas de la "teoría del derrame".

Kirchner planteó que la dirigencia argentina tuvo parte de la responsabilidad en la implmentación de esas políticas en el pasado, y reclamó que "también la asuman quienes contribuyeron, alentaron" y llevaron al aumento de la deuda.

Finalmente, advirtió que la "gobernabilidad estará en riesgo si no creamos trabajo" en la región y pidió que "el rol de la inversión y las empresas sea ejercido con responsabilidad social".

"Debemos lograr que la globalización sea para todos y no unos pocos", expresó el jefe de Estado, e invitó a ver "el sufrimiento y los logros que alcanzó Argentina".

El documento que firmarán los presidentes del continente mañana, al finalizar la IV Cumbre de las Américas mantiene aún tres puntos en desacuerdo de los casi 70 párrafos que tendrá la declaración: los referidos al ALCA, a la Ronda de Doha en la OMC y a los inmigrantes ilegales, confió Eduardo Sigal, uno de los negociadores argentinos.

Según se informó a primera hora de la noche, el Gobierno argentino buscará destrabar el Documento de la IV Cumbre de Mar del Plata en el párrafo referido al ALCA, mediante la propuesta de creación de una Comisión Redactora que encuentre, en un plazo de 30 o 45 días, una fórmula aceptable para los 34 países del continente.