El Nuevo Herald
1 de mayo de 1999

Cuba sigue en la lista negra del terrorismo

Agence France Presse
WASHINGTON

Cuba podría, si lo quisiera, salir fácilmente de la lista de estados que a juicio
de Estados Unidos patrocinan el terrorismo internacional, dijo el viernes un
alto responsable del Departamento de Estado.

Washington reconoce que Cuba ya no apoya activamente la lucha armada en
América Latina u otras regiones, pero insiste en que La Habana sigue
ofreciendo santuario a terroristas y mantiene lazos estrechos con otros
gobiernos que patrocinan actos de terrorismo.

Por esa razones, Cuba fue mantenida en el informe anual del Departamento
de Estado sobre el terrorismo internacional, junto a Irán, Irak, Libia, Corea
del Norte, Sudán y Siria, en una lista que permanece sin cambios desde
1993. Los países que figuran en dicha lista no pueden recibir ninguna ayuda
de Estados Unidos.

El informe, publicado el viernes, indica que 1998 fue el año cuando el
terrorismo causó un mayor número de víctimas: 741 muertos y 5,952 heridos,
aunque el número de atentados cayó a su nivel más bajo, con sólo 273.

El documento sostiene que Cuba ``ha reducido significativamente su apoyo a
revolucionarios izquierdistas en América Latina y otras partes, pero mantiene
estrechos lazos con otros gobiernos que patrocinan actos terroristas, y con
grupos izquierdistas insurgentes, y continúa sirviendo de santuario a un
número de terroristas internacionales''.

Un alto funcionario, que dio explicaciones sobre el informe a condición de no
ser identificado, dijo que Cuba ``podría tomar medidas, que nosotros no
juzgamos difíciles, para salir de esta lista, pero todavía no lo ha hecho''.

El documento admite que Cuba ``ya no apoya activamente la lucha armada'',
pero recuerda que previamente el gobierno de Fidel Castro ``aportó
significativos niveles de financiamiento, entrenamiento militar, armas y
orientación a varios grupos revolucionarios alrededor del globo''.

Desde el colapso de la Unión Soviética en 1991, La Habana ``se ha visto
forzada a reducir sustancialmente su apoyo a revolucionarios izquierdistas'',
agrega.

``Cuba, no obstante, continúa manteniendo estrechos vínculos con otros
Estados patrocinadores del terrorismo y grupos insurgentes izquierdistas en
América Latina'', sostiene el informe,