Primera Hora
viernes, 2 de abril de 2004

Para salvarse dan sus hijas al pastor

Entregadas como "esposas"

Maribel Hernández  PRIMERA HORA
 
La inocencia de sus hijas como ofrenda de salvación.

Un matrimonio fue acusado ayer de maltrato a menores por negligencia tras supuestamente ofrendar a sus hijas como esposas al pastor José Oscar Candelario Ayala, del Tabernáculo Branham, a cambio de obtener la corona de la salvación como parte de un ritual religioso.

La fiscal Melissa Vázquez, de la Unidad Especializada de Maltrato a Menores y Delitos Sexuales, acudió ayer a la sala del juez Orlando Puldón para presentar dos cargos de maltrato por negligencia contra Víctor Jesús Burgos Pagán, de 44 años, y Aura Sanmartín Valladares, de 39, contra quienes se encontró causa para arresto. El matrimonio prestó fianzas individuales de $20 mil a través de la Oficina de Servicio con Antelación a Juicio (OSAJ).

Contra el pastor, que está acusado en otro caso, no se presentaron nuevos cargos.

"Teniendo conocimiento de que las hijas corrían peligro de que un adulto pudo haber tenido acceso sexual en contra de la voluntad de sus hijas, ellos en ningún momento las protegieron", expresó la fiscal cuando se le preguntó en qué consistió la negligencia de los padres con sus hijas de 16 y 14 años, las cuales fueron removidas del hogar junto a otra niña de diez años y puestas bajo la custodia de la abuela materna.

De acuerdo con la investigación a cargo de la agente Karen González, de la división de Delitos Sexuales de Carolina, el 6 de octubre de 2002, con motivo del quinceañero de una hija, la pareja la había ofrendado para casarse con el pastor y mantenía comprometida a otra hija, dos años menor, siguiendo al pie de la letra el pasaje bíblico de Lea y Rebeca. La adolescente mayor, luego de ser besada en la boca por el pastor, se negó a colocarse una corona, lo que provocó una conmoción dentro del templo.

Al día siguiente, la niña no fue a la escuela José Calzada Ferrer del barrio Campo Rico, en Canóvanas, y cuando regresó el 8 de octubre, conversó con otra menor que aceptaba ser parte del "ciclo" y le explicó que repudiaba esa ceremonia. La otra niña, convencida de que lo que hacía era la voluntad de Dios, decidió llamar a la esposa del reverendo para contarle lo ocurrido.

Cuando la quinceañera se enteró de que iban a pasar a recogerla a la escuela, corrió junto con su hermana y se escondió en una tienda de productos naturales alegando que se sentía nerviosa y amenazada, por lo que se decidió llamar a la Policía y al Departamento de la Familia, que iniciaron la pesquisa. Desde ese momento se le despojó al matrimonio de la custodia de las menores.

Los padres de las niñas mantienen su versión de que su acción es parte de un ciclo y que ese tipo de compromiso representa la salvación de su familia, agregó la agente investigadora.

Burgos Pagán, que en todo momento lució sonriente y relajado en la sala de espera del tribunal, trabajaba como pagador de un banco y renunció a su empleo por las presiones generadas por la investigación.

La pareja, representada por el Lcdo. Allan Peña, se allanó a la vista para evitar contrainterrogar a las menores durante el proceso que tuvo cinco minutos de duración.

Una vez terminados los trámites en la OSAJ, las menores esperaron hasta que salió su madre, descrita como una mujer sumisa, de hablar pausado, callada y reservada, para darle un beso. Las niñas manifestaron que querían que sus padres salieran de la secta porque los amaban.

La fiscal del caso explicó que este caso, que continúa abierto bajo investigación, abrió la caja de Pandora de las irregularidades que han ocurrido en el templo. No se radicaron cargos por agresión en su modalidad menos grave contra Can-delario Ayala porque al año el caso prescribió.

Observó que las niñas tuvieron que recibir ayuda sicológica debido a que tenían mucho temor por la reacción de sus padres y de la feligresía. De hecho, no sólo las víctimas están afectadas emocionalmente, sino una de las testigos de la misma edad que a su llegada a la sala de espera irrumpió en llanto, nerviosa por el proceso que enfrentaría.

"Es una madeja bien grande. Estamos tratando de aclararlo todo en todas las jurisdicciones que pisó", sostuvo la fiscal.

La vista preliminar del caso fue señalada para el 20 de abril.