Leonardo Aldridge  DE THE ASSOCIATED PRESS

A los 61 años de edad y con problemas de alta presión, el convicto ex presidente cameral Edison Misla Aldarondo fue sentenciado ayer a diez años de cárcel por cometer actos lascivos contra su hijastra.

Misla Aldarondo comenzaría a cumplir su nueva sentencia tan pronto extinga la pena carcelaria federal de cinco años y 11 meses por cargos de corrupción gubernamental.

La sentencia contra el ex funcionario es de diez años por cada uno de los cuatro cargos de actos lascivos, pero la jueza Lourdes Veláquez Cajigas determinó que Misla Aldarondo podría cumplirlos de forma concurrente.

En una carta difundida por su hermano Domingo Misla a los medios de comunicación, Misla Aldarondo reiteró su inocencia y repitió que si no estuviese identificado con el movimiento novoprogresista, el caso no hubiese prosperado.

"En el día de hoy he sido injustamente sentenciado por un delito que no cometí, por una acusación absurda donde no hubo víctima porque no hubo delito", dijo el ex legislador en su misiva de página y media. "Si en vez de llamarme Edison Misla, mi nombre hubiese sido Juan del Pueblo, este caso no hubiese pasado de vista preliminar", expresó el ex delegado nacional del Partido Republicano en la Isla.

Misla Aldarondo, vestido con el uniforme de prisionero federal, no mostró mayor emoción cuando se leyó la sentencia.

El abogado del ex legislador, Marc Anthony Bimbela, aseguró que apelará el caso, pero no quiso abundar sobre cómo su cliente, quien ha detallado su precaria situación económica, pagará esos gastos.

Por su parte, la fiscal especial independiente Ana Paulina Cruz expresó que la sentencia le pareció justa y que envía un mensaje a los niños de que pueden confiar en que el sistema judicial los protegerá.

"Los niños y jóvenes se pueden dar cuenta que por más poder que tengan (los adultos) no pueden abusar sexualmente", dijo Cruz a su salida de sala.

El ministerio público había solicitado agravantes a la sentencia contra Misla Aldarondo por "su historial delictivo" y por entender que trató de ejercer presión sobre la investigación y los testigos. Cada uno de los cargos por actos lascivos conllevaba una pena de seis a diez años de prisión.

La fiscal Cruz opinó que la determinación de que la sentencia por actos lascivos sea cumplida separada a la de cargos de corrupción federal es "justa porque son hechos separados".

"Estamos muy conformes con la sentencia... Son hechos distintos y no es justo que los actos lascivos se cumplan a la vez que otros cargos de corrupción", dijo.

La también fiscal Ivette Aponte calculó que, con bonificaciones y programas de desvío, la sentencia dictada contra Misla Aldarondo podría reducirse a seis años y cuatro meses, pero el ex legislador tiene pendientes todavía casos por violación y corrupción gubernamental.

Tanto el ministerio público como Bimbela informaron que Misla Aldarondo se encuentra en confinamiento solitario, "el hoyo", en la cárcel federal de Guaynabo desde hace aproximadamente tres meses. De inmediato no resultaron claras las razones para ese tipo de encarcelamiento.

El convicto ex legislador dijo que a pesar de todos los procesos judiciales en su contra, actualmente mantiene la fe en la justicia y expresó que recientemente leyó el "Manual del guerrero de la luz", del escritor brasileño Paulo Coelho, a quien citó en su misiva.

Misla Aldarondo fue hallado culpable el pasado 30 de agosto por cuatro cargos de actos lascivos contra su hijastra Tania Pérez Cruz, quien era menor de edad durante los hechos imputados a su padrastro.

El ex representante, quien enfrentará en febrero un juicio por un cargo de violación y dos de perversión de menores, cumple una sentencia federal de cinco años y 11 meses de cárcel por cargos de corrupción relacionados con la venta del hospital de Manatí. También tiene pendiente otro juicio, señalado para diciembre, por 16 cargos de corrupción.