El Nuevo Herald
July 16, 1998
 
 
El Times usó a la CIA para investigar a Mas Canosa

RUI FERREIRA El Nuevo Herald

El diario The New York Times reveló que había utilizado los expedientes que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) tiene sobre Jorge Mas Canosa, el fallecido líder de la Fundación Nacional Cubano Americana, y sobre Luis Posada Carriles como fuentes para una serie de reportajes sobre las relaciones entre ambos exiliados, cuyo contenido ha desatado una fuerte controversia entre el rotativo y la Fundación.

En un comunicado poco usual, destinado a frenar una ola de acusaciones, suspicacias y lo que llamó ``desinformación'', el Times aseguró el miércoles que sus fuentes incluyen también el testimonio de cerca de 100 personas, 13 horas grabadas de entrevistas y conversaciones con Posada, archivos de inteligencia, declaraciones juradas, la autobiografía de Posada e incluso documentos suyos firmados de puño y letra.

El diario reiteró su ``apoyo y confianza'' en los autores de los artículos, el corresponsal en Miami Larry Rohter y la periodista independiente Ann Louise Bardach.

El fin de semana pasado, el Times publicó dos extensos reportajes en los cuales el exiliado anticastrista Posada Carriles, acusado de actos terroristas y actualmente escondido en Centroamérica, afirmó haber recibido dinero para sus actividades de la FNCA y su fallecido líder, Mas Canosa.

El lunes, Jorge Mas Santos, el hijo mayor de Mas Canosa, convocó a una rueda de prensa y rechazó enérgicamente las alegaciones y acusó a los periodistas del Times de fundamentar sus reportajes en una fuente sin credibilidad.

Al final de la conferencia, se exhibió una entrevista del periodista Rafael Orizondo, de WLTV-Canal 23, con Posada, en la cual éste negaba haber dicho al Times que recibía dinero de Mas y la Fundación.

``La periodista (...) hizo un reportaje terrible, con una serie de falacias'', dijo Posada. Lo publicado ``se aparta completamente de la verdad'', agregó.

``Yo no represento el brazo armado de nadie, no pertenezco a la Fundación ni a ninguna organización del exilio'', sostuvo el exiliado anticastrista.

Los reportajes fueron publicados el sábado y el domingo. La entrevista de Posada con el Canal 23 ocurrió el lunes por la mañana, y esa tarde la rueda de prensa en la Fundación empezó con una hora de retraso, aparentemente porque se esperaba la llegada de las imágenes.

Estas coincidencias y el hecho de que la entrevista fuera anunciada casi al inicio de la rueda de prensa levantó algunas suspicacias, como que la Fundación la hubiera facilitado y los reporteros hubieran utilizado un avión de la influyente organización del exilio.

Las suspicacias se incrementaron aun más cuando una vocera de Univisión, a quien el Canal 23 está afiliado, dijo que un miembro de la Fundación estuvo presente durante la filmación de la entrevista.

``Hablé con los ejecutivos de noticias del Canal 23 en Miami y ellos nos explicaron que alguien de la Fundación estuvo allá. No sabemos quién ni por qué'', dijo Anne Corley el martes por la noche.

El miércoles, Orizondo desmintió esa versión a El Nuevo Herald. ``A la grabación asistió sólo el camarógrafo y yo'', dijo el veterano reportero.

``No quiero entrar en más detalles sobre esto; se han dicho muchos disparates al respecto'', añadió y remitió cualquier otra pregunta a Myrna Sonora, la directora de noticias del canal, quien no devolvió llamadas al respecto.

El miércoles por la tarde, Corley se retractó sobre lo que había dicho antes y expresó a El Nuevo Herald que había cometido un error. ``Inicialmente pensamos que ésa era la información correcta, pero después verificamos con nuestras oficinas en Miami y Orizondo aclaró que no había nadie con él en la entrevista, excepto el camarógrafo'', dijo la ejecutiva desde Los Angeles.

Corley rehusó hacer comentario alguno sobre cómo viajaron y quien pagó los gastos de desplazamiento de los reporteros del Canal 23. ``El señor Orizondo no quiere entrar en esos detalles para no revelar sus fuentes ni cómo obtuvo la información'', añadió la ejecutiva.

Voceros de la Fundación negaron la participación de la organización o alguno de sus miembros en la concreción de la entrevista, al mismo tiempo que sus abogados enviaron al Times una notificación en la que anuncian la demanda legal contra el rotativo.

La carta pide que el diario se retracte de las alegaciones que implican a Mas Canosa y la Fundación en las actividades de Posada, y pone dos condiciones: debe explicar que uno de los autores del artículo, Bardach, ha sido objeto de una demanda por difamación por algo que escribió sobre Mas Canosa en otra publicación, y debe incluir las declaraciones de Posada negando una conexión de la Fundación con sus operaciones.