El Nuevo Herald
5 de septiembre de 1998
 

 Violencia en Perú dejó 1,500 policías muertos

 Lima --(AP)-- De los 30,000 muertos que dejó la violencia subversiva
 en Perú durante 15 años, 1,500 fueron policías, se informó el viernes
 oficialmente.

 El general Danilo Guevara dijo que durante esos 15 años de acción del
 grupo maoísta Sendero Luminoso, el Estado se vio obligado a oponerles
 una violencia legítima para derrotarlos.

 Guevara dijo que el costo de la violencia subversiva de Sendero
 Luminoso y el procastrista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru
 (MRTA) fue muy alto y se resume en 30,000 muertos y $30,000
 millones en daños.

 Indicó que entre los fallecidos figuran 1,500 policías, además de otros
 1,500 que quedaron inválidos. Es la primera vez que la policía revela el
 número de sus víctimas durante la lucha contra la subversión.

 Guevara dijo que la violencia fue promovida por aproximadamente
 10,000 militantes de Sendero Luminoso, cifra que tampoco había sido
 revelada oficialmente.

 Guevara no dijo cuántos fueron los guerrilleros del MRTA, pero según
 mandos de esa organización, durante su apogeo tuvo 4,000 hombres.

 Sendero Luminoso, al mando de su cabecilla Abimael Guzmán, acometió
 lo que llamaba su lucha armada en mayo de 1980, en un intento de
 derrocar al gobierno constitucional.

 Unos años después, el MRTA, encabezado por su jefe Víctor Polay,
 siguió los pasos de Sendero Luminoso.

 Ambos grupos, que actúan por separado, perpetraron atentados
 terroristas contra la propiedad pública y privada, abatieron autoridades y
 sostuvieron enfrentamientos armados con soldados y policías. También
 secuestraron a empresarios quienes fueron liberados previo pago de
 rescates en miles de dólares, o asesinados si no cumplían sus exigencias.

 Guzmán y Polay fueron capturados en 1992 y condenados a penas de
 cadena perpetua, que cumplen en una base naval en el puerto El Callao.

 Desde 1992 han amainado los atentados terroristas, aunque todavía
 ocurren periódicamente.

 En los episodios de violencia más recientes, según el ministerio de
 Defensa, entre el 30 de agosto y 1 de septiembre, patrullas militares y
 policiales se enfrentaron a tiros con guerrilleros del MRTA en tres
 oportunidades, en una región de la selva central, donde se encuentra su
 bastión.

 Tras los enfrentamientos las fuerzas de seguridad arrestaron a 13
 insurgentes y les confiscaron armas, municiones, vituallas y equipos de
 comunicaciones.