El Nuevo Herald
18 de diciembre de 1998

A dos años de toma de rehenes, languidece MRTA

 MARIA JOSE GONZALEZ
 Reuters

 Lima -- Dos años después de asaltar la residencia del embajador de
 Japón en Lima, en una toma de rehenes que sacudió al mundo, el grupo
 terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, de tendencia
 guevarista, lucha por sobrevivir en el interior de Perú.

 ``Ciertamente, la presencia política y militar del MRTA se ha reducido a
 cero'', dice el sociólogo Raúl González. ``Pero no es saludable hacer
 afirmaciones categóricas hasta que no hayan caído los últimos miembros
 o hasta que la dirección del grupo no decida públicamente disolver la
 organización''.

 El 17 de diciembre de 1996, a las 8:30 de la noche, los disparos y
 explosiones rompieron la tranquilidad de la exclusiva zona residencial de
 San Isidro en Lima.

 Un grupo de 14 guerrilleros tomó entonces en rehenes a más de 600
 invitados a una fiesta en la residencia diplomática.

 En la reunión se encontraban presentes funcionarios de las distintas
 embajadas presentes en Lima, así como miembros del gobierno,
 congresistas y altos representantes de la industria, el comercio y las
 finanzas.

 Incluso la madre y uno de los hermanos del presidente Fujimori
 permanecían en la residencia del embajador japonés --lo que
 aparentemente no fue advertido por los terroristas-- pero lograron salir
 en el primer grupo de rehenes liberados esa misma noche.

 Entonces se hablaba también del desmantelamiento del MRTA, grupo
 guerrillero de ideología guevarista que nació a comienzos de la década
 de los años 80 y considerado la segunda organización terrorista, después
 del maoísta Sendero Luminoso.

 Pero el golpe sacudió al gobierno de Alberto Fujimori, quien
 consideraba a ambos grupos terroristas prácticamente disminuidos tras
 capturar a sus principales cabecillas y fundadores: Víctor Polay, del
 MRTA, y Abimael Guzmán, de Sendero, a comienzos de esta década.

 Tras 126 días de zozobra, Fujimori ordenó el 22 de abril de 1997 el
 rescate de los 72 rehenes que seguían en la residencia, acabando con la
 toma rebelde más prolongada de América latina.

 En el operativo murieron los 14 rebeldes, entre ellos su líder, Néstor
 Cerpa Cartolini, dos comandos y uno de los rehenes.

 Según una grabación difundida el jueves por el diario El Comercio, que a
 su vez la tomó de medios de prensa japoneses, Cerpa estaba dispuesto a
 matar a los rehenes.

 Las grabaciones fueron captadas por pequeños micrófonos introducidos
 subrepticiamente en la residencia y que a la postre ayudaron a diseñar el
 rescate, según fuentes militares.

 ``Si una enseñanza deja la toma de la residencia es la de no realizar
 afirmaciones categóricas de la vida de un movimiento político'', afirma
 González.

 ``Se tiene conocimiento de que aún existe armamento y células que si
 bien no son muy activas, constituyen elementos suficientes para no hacer
 afirmaciones categóricas [de que el MRTA está destruido]'', agregó el
 sociólogo, experto en temas de seguridad.

 En septiembre de este año, las fuerzas militares capturaron en la sierra
 central a nueve miembros del MRTA y les decomisaron abundante
 arsenal, desde fusiles y ametralladoras hasta granadas y lanzacohetes.

 El armamento, dijeron las autoridades, serviría para boicotear las
 elecciones municipales de octubre.

 Posteriormente, en noviembre, Fujimori anunció la captura del jefe militar
 de MRTA, Remigio Huamán, ``camarada Joel''.

 En un comunicado difundido el jueves en la página del MRTA en la
 Internet, portavoces del grupo en el extranjero hicieron un llamamiento
 para fortalecer las bases de la organización, actualmente liderada por
 Hugo Avellaneda.

 ``Hoy nuestro pueblo está en pie de lucha, pero aún falta fortalecer
 nuestras organizaciones autónomas de base, forjar un proyecto de
 socialismo autóctono'', señala el comunicado.

 Según estimaciones de expertos en guerrilla, el MRTA contaría con unos
 200 hombres en la selva y algunas zonas de la sierra central.

 Las fuerzas militares están tras la pista de Avellaneda, quien según
 versiones de prensa no confirmadas, se desplaza entre Perú y Bolivia.