El Nuevo Herald
11 de septiembre de 1998
 

 Frustran plan de MRTA contra comicios

 Lima --(Reuters)-- El plan terrorista que las fuerzas de seguridad
 peruana desbarataron al capturar el miércoles a una célula del
 Movimiento Revolucionario Túpac Amaru estaba dirigido a boicotear las
 elecciones municipales de octubre, se confirmó el jueves.

 En diferentes operaciones en Lima y el interior del país, la policía, el
 ejército y el servicio de inteligencia capturaron a nueve guerrilleros del
 MRTA y les decomisaron abundante arsenal, desde fusiles y
 ametralladoras hasta granadas y lanzacohetes.

 El ministro de Defensa de Perú, Julio Salazar, informó en una conferencia
 de prensa que los rebeldes preparaban además atentados contra
 representantes políticos, empresariales, militares y hasta de la Iglesia
 Católica.

 ``Las fuerzas del orden (...) han dado un duro golpe a la columna más
 importante del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) que
 tenía entre sus principales objetivos impedir la realización de las
 elecciones municipales de 1998'', señaló Salazar en una presentación del
 alijo incautado.

 Indicó que los rebeldes fueron capturados en el marco del ``Plan de
 Operaciones Ashaninka 98'' realizado durante las últimas dos semanas
 en los departamentos de Lima, Junín y Pasco, en el centro de Perú.

 ``Querían efectuar acciones de terrorismo selectivo contra diversas
 autoridades políticas, militares, diplomáticas, eclesiásticas y personal de
 inteligencia que participaron en el operativo Chavín de Huántar [que
 rescató a rehenes en la residencia del embajador japonés en Lima]'',
 dijo.

 Sin embargo, el portavoz del MRTA, Isaac Velazco, negó en una
 entrevista telefónica con Reuters desde Hamburgo, Alemania, que las
 personas capturadas eran miembros de su organización.

 ``No son del MRTA. Tengo entendido que los capturados son civiles'',
 dijo Velazco y agregó que piensa que la policía antiguerrillera peruana
 presionó para lograr que los detenidos se autoinculpen.

 Analistas señalaron que las declaraciones del portavoz del MRTA
 parecen ser una táctica del movimiento para minimizar las capturas
 consideradas por analistas locales como una de las más importantes de
 los últimos años.

 La importante captura incluye a Mariano Antonio Zambrano, camarada
 ``Alejandro'', de 45 años, señalado como el responsable de
 comunicaciones del grupo y quien se fugó en 1990 de una cárcel limeña
 con el líder Víctor Polay, quien fue recapturado dos años después.

 Asimismo, fue detenido José Rodríguez Aguilar o Abel Rodríguez
 Rodríguez, de 30 años, camarada ``Miguel'', mando militar de una
 división del MRTA en la selva central.

 Según las fuerzas militares, el camarada Miguel fue seleccionado por la
 dirección nacional del MRTA para integrar una fuerza especial que tenía
 como misión la toma del Congreso en 1995, la cual fue abortada por la
 policía.