El Nuevo Herald
Sep. 01, 2004

Torrijos ofrece atacar los males de Panamá

JUAN ZAMORANO / AP
PANAMA

Con su juventud y energías a flor de piel, Martín Torrijos arranca hoy su gobierno presidencial de cinco años con promesas de atacar la corrupción y viejas lacras como el desempleo.

Torrijos, de 41 años, se convertirá en uno de los líderes más jóvenes en llevar las riendas de este país de 2.8 millones de habitantes, que restableció la democracia hace 14 años y que lleva cuatro sin la presencia militar estadounidense.

Hijo del extinto general populista Omar Torrijos, el político y economista graduado en Estados Unidos se impuso contundentemente y con gran respaldo del electorado joven en los comicios de mayo.

Asumirá con mayoría en la asamblea unicameral, y encontrará un país que opera plenamente el canal interoceánico desde fines de 1999.

Unos diez mandatarios extranjeros, así como el Secretario de Estado norteamericano Colin Powell, asistirán a la toma de posesión.

''Mi compromiso es hacer un gobierno para todos'', dijo Torrijos, quien será el cuarto mandatario escogido en las urnas después de la invasión estadounidense que derrumbó el régimen de Manuel Noriega a fines de 1989.

Se estima que el desempleo golpea a algo más de 100,000 y la pobreza a casi la mitad de los 2.8 millones de panameños.

La presidenta Mireya Moscoso admitió ayer, en su último informe de gestión, que Panamá sigue siendo un país injusto en cuanto a la distribución de la riqueza.

''Aún queda un largo camino por recorrer para tener la sociedad justa, equitativa y estable que anhelamos'', señaló la mandataria, quien traspasará el mando a Torrijos hoy miércoles.

Atraer inversiones extranjeras, concretar tratados de libre comercio y fomentar la pequeña y mediana empresas pintan como los retos de Torrijos para hacerle frente a los reclamos socioeconómicos de los panameños. Torrijos ya realizó viajes a varios países latinoamericanos y de Europa, a fin de buscar inversiones en el istmo.

Torrijos también prometió borrar la alta percepción de corrupción que prevaleció en el gobierno de Moscoso.

Los analistas sostienen que erradicar ese mal es un paso clave para atraer capitales extranjeros, en un país con zonas y edificaciones cercanas al canal estratégicas.

Al nuevo presidente le tocará terminar las negociaciones que emprendió Moscoso con Estados Unidos para un tratado de libre comercio.

Torrijos ha dicho que será importante seguir impulsado los viejos nexos con Estados Unidos, que tienen inversiones por más de 25.000 millones de dólares aquí.