Agence France Press
  MANAGUA

  El presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, anunció ayer, a través de su vocero, que está dispuesto a colaborar con las investigaciones que lo vinculan a
  un presunto desvío de fondos públicos cuando fue vicepresidente del gobierno de Arnoldo Alemán (1997-2002).

  El mandatario ''siempre está anuente a colaborar con cualquier investigación'', aseguró a la AFP el secretario de Comunicación Social de la Presidencia de
  Nicaragua, Joel Gutiérrez.

  La Contraloría anunció que averiguará la responsabilidad que tuvo el actual gobernante en un presunto millonario desvío de fondos públicos al exterior
  durante el gobierno de Alemán.

  El ex presidente Alemán fue condenado a 20 años de cárcel por lavado de dinero y otros delitos de corrupción, los cuales fueron denunciados por el
  gobierno de Bolaños, pero cumple la condena en su domicilio.

  Las pesquisas contra Bolaños fueron ordenadas luego de que Alemán acusó a su antecesor ante la Contraloría de haber participado en actos ilícitos
  cuando fue vicepresidente (1997-septiembre de 2000) durante su gobierno, reveló el contralor colegiado Luis Montenegro.

  ''Esto es parte de la estrategia tonta de Alemán, quien en lugar de probar y demostrar su inocencia trata de manchar la imagen de otras personas'', afirmó
  el vocero presidencial.

  El ex mandatario hizo las declaraciones durante un interrogatorio que los auditores de la oficina de fiscalización le realizaron el martes pasado en su
  residencia para conocer su participación en otro fraude detectado durante su administración por unos 60 millones de dólares.

  Una investigación de la Contraloría divulgada en enero pasado reveló que el gobierno de Alemán usó partidas extrapresupuestarias para desviar dinero
  hacia cuentas en bancos de Panamá y Estados Unidos.

  Los fondos regresaron a Nicaragua a través de una cuenta que sirvió, entre otras cosas, para pagar ''gastos especiales'' de la Presidencia que no fueron
  reportados.

  El ex presidente Alemán negó los nuevos cargos y dijo desconocer la existencia de esas cuentas en el extranjero, al tiempo que aprovechó para incriminar
  a Bolaños como uno de los funcionarios de su gobierno que se benefició con sobresueldos (con fondos no presupuestados), que habrían significado un
  gasto de al menos 24 millones de dólares.

  Según el ex mandatario, Bolaños habría participado en una reunión en la que se acordó la asignación de sobresueldos a altos funcionarios en el año 2000,
  junto al actual ministro de Hacienda.