Granma Diario
18 de abril de 2003
Victoria moral de Cuba

Derrotada la maniobra injerencista promovida por Estados Unidos en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU

GINEBRA, 17 de abril.— Juan Antonio Fernández, director de Asuntos Multilaterales de la Cancillería y jefe de la representación cubana en la sesión de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, declaró que su país rechazó con toda firmeza el intento espurio de condenarla.

El diplomático de la Isla se mostró satisfecho por la colosal victoria moral de su país alcanzada este jueves, con el respaldo de un grupo de naciones, fundamentalmente de Asia y África.

Cuba sabe, añadió, que defiende para su pueblo y para todos los pueblos del mundo el derecho al respeto de su soberanía y autodeterminación, y subrayó que se le intenta condenar porque ha luchado por ser libre y ni condenas ni campañas ni mentiras ni bloqueos ni agresiones la harán renunciar a su decisión inquebrantable de defender su Revolución y su independencia.

Después de un encendido debate con varios momentos de tensión, el proyecto de resolución anticubano impuesto por Estados Unidos pasó hoy por el escaso margen de 24-20 votos, reportó PL.

En contra del documento y en respaldo a Cuba se pronunciaron Argelia, Bahrein, Burkina Faso, China, Cuba, República Democrática del Congo, Gabón, India, Libia, Malasia, Paquistán, Rusia, Arabia Saudita, Sudáfrica, Sudán, Siria, Ucrania, Venezuela, Viet Nam y Zimbabwe.

A favor del documento estuvieron Armenia, Australia, Austria, Bélgica, Camerúm, Canadá, Chile, Costa Rica, Croacia, Francia, Alemania, Guatemala, Irlanda, Japón, México, Paraguay, Perú, Polonia, Sudcorea, Sierra Leona, Suecia, Gran Bretaña, Estados Unidos y Uruguay.

Las abstenciones fueron de Argentina, Brasil, Kenya, Senegal, Sri Lanka, Swazilandia, Tailandia, Togo y Uganda.

Esa votación estuvo precedida de la toma de acciones sobre una proyectada enmienda propuesta por Costa Rica en la cual se "endurecía el lenguaje" de condena a Cuba, como había querido ayer el embajador de Estados Unidos.

El borrador fue rechazado por 31 votos, con 15 favorables y siete abstenciones.

En cuanto a los resultados de las dos enmiendas presentadas por Cuba, la primera exigiendo el cese inmediato del bloqueo de Estados Unidos por más de 40 años, no fue aprobada, ya que obtuvo 17 respaldos y 26 votos contrarios y 10 abstenciones.

En ese preciso momento, el representante permanente de Cuba, embajador Iván Mora Godoy, pidió la palabra para decir que ese resultado fue la vergüenza de la CDH y la desfachatez más grande que ha ocurrido ante los ojos de la opinión pública internacional.

Los que han votado en contra, Estados Unidos, sus aliados del grupo occidental y seguidores de Europa, y los lacayos de América Latina que se plegaron, han reflejado la hipocresía y la doble moral con que se tratan los derechos humanos en este foro y están desenmascarados, exclamó.

Añadió que por eso Cuba no insistiría en la segunda propuesta por considerarlo innecesario, pues sabe que votarán igual de sumisos ante la vigilancia del imperio.

"Los mismos que no están dispuestos a condenar el bloqueo, tampoco condenarán los actos terroristas que se cometen permanentemente contra Cuba desde los Estados Unidos. Sobre sus conciencias caerán la injusticia y las lágrimas de las madres y huérfanos de más de 3 000 cubanos asesinados por esos actos", sentenció Mora Godoy.

En un gesto de solidaridad y respaldo a Cuba, una pareja de ciudadanos uruguayos participantes en el foro desplegaron una bandera de la paz frente al escaño vecino, el de la delegación estadounidense.

Los funcionarios de Washington se precipitaron a reclamar la intervención de los oficiales de seguridad de la ONU, pero no fue necesario, pues ambos autores de la acción salieron tranquilamente, sin ofrecer resistencia, evidentemente como pacifistas que eran.

Los resultados de la votación confirmaron el pronóstico del editorial de Granma, donde advertía que "fuere cual fuese el resultado final de la sesión de hoy, nuestro pueblo, con su valor y su firmeza, el apoyo de lo que más vale y brilla entre los dirigentes del mundo y el aliento de las fuerzas verdaderamente revolucionarias y progresistas, ha obtenido ya en este enfrentamiento una histórica victoria en su batalla de ideas contra los que desde el gigantesco poder de la gran nación cuyo gobierno han usurpado, tratan de imponer al resto de los países una tiranía mundial fascista...".

"La batalla en Ginebra demuestra que las ideas pueden y deben vencer a las armas para que un mundo mejor sea posible."