El Nuevo Herald
Jul. 23, 2005

Desatan nueva ola represiva en Cuba

WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald

La espiral de tensiones y descontento popular desembocaron ayer en una nueva nueva ola represiva del régimen de Fidel Castro contra el movimiento disidente cubano, con el arresto de la líder opositora Martha Beatriz Roque y otras prominentes figuras de su organización entre una veintena de detenciones.

Roque, de 59 años, presidenta de la Asamblea para Promover la Sociedad Civil (APSC), fue arrestada por agentes de la Seguridad del Estado poco después de abandonar su casa, alrededor de las 8:30 a.m., cuando planeaba incorporarse a una protesta pública, convocada la víspera por su agrupación.

Junto a ella fueron también detenidos el abogado René Gómez Manzano, de 63 años, y el ingeniero Félix Bonne Carcasés, de 66, ambos vicepresidentes de la APSC.

La Habana vivió desde el amanecer de ayer una inusual jornada de manifestaciones disidentes, redadas policiales y mítines progubernamentales, en un nuevo peldaño de la turbulencia política que ha agitado la vida nacional durante los últimos siete días.

Al menos 20 disidentes arrestados, una decena de allanamientos de hogares y actos de repudio, daban cuenta anoche de la arremetida gubernamental contra el movimiento opositor en la capital cubana.

Roque abandonó su casa en compañía de José Escudero Marrero, su chofer, con el propósito de dirigirse a una manifestación convocada frente a la Embajada de Francia, situada en la barriada de Miramar.

''Ha llamado gente de todo el mundo para saber de ella'', relató Yarai Reyes, esposa del prisionero político Normando Hernández. ''La vi salir esta mañana y coger el carro, eso fue todo''. Reyes se encontraba en casa de Roque tras visitar a su esposo, que cumple una condena de 25 años en una prisión de Pinar del Río, en el oeste de la isla.

Roque, que fue excarcelada con una licencia extrapenal hace un año, planeaba recoger a Bonne Carcasés para dirigirse juntos a la protesta en la sede diplomática, pero nunca llegó. El paradero de ambos permaneció bajo una incógnita hasta poco después de las 8 p.m.

''Todas estas detenciones son absolutamente arbitrarias y constituyen una violación flagrante de los derechos ciudadanos'', manifestó anoche Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), quien adelantó que la cifra de arrestados podría llegar a 30.

Sánchez dijo que no hay información sobre dónde fueron llevados los disidentes, todos vinculados a la convocatoria de la protesta.

La manifestación se desarrolló finalmente con la presencia de apenas 15 personas, quienes pidieron la liberación de seis disidentes arrestados durante actos organizados el pasado 13 de julio en diferentes puntos de La Habana. Los organizadores seleccionaron la Embajada de Francia luego de que altos funcionarios del régimen cubano fueran acogidos allí durante los festejos de la fecha nacional francesa, el pasado 14 de julio, relegando la invitación a representantes de la disidencia interna.

Según informes de activistas de derechos humanos, la Seguridad del Estado acometió desde el amanecer del viernes numerosos operativos en las cuadras de los disidentes para impedir su asistencia a la protesta. Varios teléfonos quedaron incomunicados durante todo el día.

La CCDHRN reportó varios incidentes ocurridos en las barriadas y hogares de opositores que presuntamente fueron convocados a la protesta pública.

Por su parte, Reyes reveló a El Nuevo Herald una lista de 17 disidentes que hasta las 6 p.m. del viernes permanecían arrestados, entre ellos Miguel Valdés Tamayo, condenado junto a Roque en la llamada causa de los 75 y liberado el pasado año con una licencia extrapenal por razones humanitarias.

Además, en el listado figuraban los disidentes Niurka Peña y Katia Sonia Martín, ambas secretarias de la APSC; monseñor Ricardo Santiago Medina Salabarría, representante de la Iglesia Ortodoxa Bizantina en Cuba; Francisco Maure, Yusimí Gil Portel, Miguel López, Gloria Cristina Rodríguez, Raúl Martínez, Georgina Noa Montes, Enma María Alonso, Luis Manuel Peñalver, Ernesto Colás Julio César López, María de los Angeles Borrego y Jesús Adolfo Reyes Sánchez.

De acuerdo con informes telefónicos obtenidos por El Nuevo Herald, el disidente Modesto López Valdivia, miembro del Partido Pro Derechos Humanos, había sido ya liberado anoche tras varias horas de arresto. Un automóvil con cinco activistas que viajaba desde San José de las Lajas rumbo a La Habana, fue interceptado en la carretera por patrulleros y obligado a retornar al punto de partida, tras retirarle la chapa al vehículo.

Otros incidentes notables de la jornada, según testimonios de activistas y testigos, fueron:

• A las 5:20 a.m. del viernes se inició un fuerte operativo en la vivienda de Alberto Cárdenas, miembro del grupo Naturpaz. Los agentes policiales rompieron la puerta del inmueble luego que el ocupante tiró algunas fotografías sobre el despliegue represivo en la cuadra.

• Un centenar de partidarios del régimen se agruparon frente a la vivienda del periodista independiente Silvio Herrera Núñez, en La Habana vieja, gritando consignas de ''Gusanos, gusanos'' y ''La calle es de Fidel''. Las turbas increparon a los representantes de la prensa extranjera en el lugar, les empujaron y zarandearon sus vehículos mientras coreaban ''No queremos prensa extranjera, prensa gusana que ayuda a los contrarrevolucionarios'', sin que la policía interviniera.

• En el pueblo de Regla, la opositora Lázara Suárez se vio impedida de salir a la calle cuando grupos progubernamentales rodearon su vivienda portando cabillas y palos con actitud amenazante.

• Policías y manifestantes irrumpieron en la vivienda de Katia Sonia Martín, la golpearon a ella y a sus hijas gemelas de dos años, y se llevaron a su esposo con las manos atadas.

Los enfrentamientos entre opositores y partidarios del régimen han cobrado bríos después de llamamientos gubernamentales en centros de trabajo y planteles estudiantiles a ``no permitir que los contrarrevolucionarios tomen las calles''.

Desde el pasado 13 de julio, fecha en que varios disidentes se manifestaron públicamente, han sido activadas las llamadas ''brigadas de respuesta rápida'' y se han incrementado los despliegues policiales en La Habana y ciudades del interior.

Las confrontaciones sociales se producen a escasos días de la celebración del acto central en La Habana por el 26 de julio, en ocasión del 52 aniversario del ataque al Cuartel Moncada.