El Nuevo Herald
Sep. 09, 2004

Clamor de libertad a la Patrona de Cuba

WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald

Una veintena de esposas, madres e hijas de los 75 disidentes encarcelados por el régimen de Fidel Castro elevaron sus plegarias a la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, durante la tradicional festividad religiosa que los cubanos realizan cada 8 de septiembre en la isla y la diáspora.

Las mujeres, identificadas por su vestimenta como las Damas de Blanco, marcharon también anoche en una procesión que atrajo a unas 15,000 personas, que recorrieron unas 15 cuadras del centro de La Habana tras la imagen de la Virgen, encabezados por el cardenal Jaime Ortega Alamino.

Junto a los cánticos religiosos, en la multitud se escucharon gritos de ''¡Libertad, libertad!'', según testimonios de participantes.

Mientras, en la Arena American Airlines del centro de Miami, cientos de feligreses se congregaron para la homilía en la Fiesta de la Virgen ofrecida por monseñor Felipe de Jesús Estévez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Miami, quien no escatimó votos en favor de la democracia y la libertad para el pueblo de Cuba.

Reunidas en la vivienda del periodista y poeta Raúl Rivero, en la barriada de Centro Habana, las mujeres leyeron pasajes y oraciones a la Caridad del Cobre --santa defensora de los humildes y los desamparados-- y al llegar la medianoche, cada una de ellas, de pie ante una imagen de la Virgen, hizo un ruego para la libertad de sus seres queridos y la suerte del país.

''Decidimos reunirnos para pedirle a la Caridad del Cobre la libertad y sólo la libertad de nuestros familiares'', declaró Blanca Reyes, esposa de Rivero y promotora de la vigilia.

Con ellas rezó y realizó peticiones religiosas la conocida opositora Martha Beatriz Roque, condenada a 20 años de cárcel y liberada recientemente con una licencia extrapenal por razones de salud.

''Fue muy emocionante cuando llegó la medianoche [del martes], porque surgió como algo mágico entre todas nosotras y nos pusimos de pie para hacer nuestras súplicas'', relató Reyes a El Nuevo Herald.

En una pared del apartamento de Rivero fue colocada la imagen de la Virgen, flanqueada por dos banderas cubanas, y sobre un tablero, las fotos y nombres de los miembros del Grupo de los 75 que permanecen encarcelados.

Durante la vigilia fue divulgado un comunicado de las mujeres, con un ruego a la Patrona de Cuba por la liberación de los 75 y de todos los prisioneros políticos de la isla.

''Nosotras, mujeres cubanas, rogamos esta noche ... para que ilumine la senda de la justicia, y recobren la libertad los prisioneros de conciencia detenidos luego de la sonada represiva de marzo del 2003, así como todos los prisioneros políticos de Cuba'', indicó la declaración.

Las firmantes recordaron que los 75 fueron condenados por ''ejercer su derecho a la libre expresión y amar a nuestra patria'', y denunciaron que son sometidos a un ''régimen de máxima severidad especial'', con gran crueldad hacia sus familias y sin la debida atención médica para sus serios padecimientos.

''La Virgen que guió a los mambises escuchará nuestros ruegos. Estamos seguras'', concluye el comunicado.

La evocación libertaria del grupo de mujeres desde Cuba estuvo muy presente anoche en la homilía de Estévez en Miami.

''El pueblo cubano de las dos orillas sufre del desgaste y el desaliento'', dijo Estévez. ``No entendemos por qué se demoran tanto los cambios necesario; no entendemos por qué la solidaridad ante el sufrimiento cubano, especialmente sus presos de conciencia, sea tan tímida y limitada; no entendemos que el miedo o el dolor sea tan poderoso y paralizante''.

Como es costumbre en Miami, la imagen de la Virgen fue trasladada en una embarcación desde la Ermita de la Caridad en Coconut Grove hasta la dársena de la Arena. En esta ocasión, fue vestida de manera especial, con un traje de tonos azules, rematado en el manto con una hilera de conchas bordadas.

Monseñor Agustín Román, obispo auxiliar emérito y fundador de la Ermita, hizo el recorrido marítimo al pie de la réplica de la Virgen que veneran los cubanos del exilio desde 1961.

La cofradía entró al recinto cerca de las 8 p.m. en medio de una fuerte ovación de los presentes.

La efigie original de la Virgen, hallada a comienzos del siglo XVII en la bahía de Nipe, Cuba, permanece en el poblado de El Cobre desde 1611. El actual santuario de El Cobre fue inaugurado en 1927.

''Hoy afirmamos que también Cuba se merece pronto la democracia y el estado de derecho, la libertad, prosperidad y la paz social, con todos y para el bien de todos'', expresó Estévez.