El Nuevo Herald
25 de noviembre de 2001

El mayor desafío es levantar la economía

 EFE
 TEGUCIGALPA

 Los hondureños concurren a las urnas hoy para elegir a un nuevo gobierno cuyo principal reto será combatir la extrema pobreza y la inseguridad, entre otros problemas graves.

 Diversos sectores coinciden en señalar que al margen de quien gane la Presidencia de Honduras, entre los favoritos Rafael Pineda Ponce, candidato del gobernante
 Partido Liberal, y Ricardo Maduro, del Partido Nacional, el próximo año será muy difícil para el país en lo económico y social.

 Mauricio Díaz, coordinador del Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH), dijo que el nuevo gobierno que asumirá el 27 de enero de 2002, ``enfrentará uno de los momentos más críticos en materia económica y social''.

 Uno de esos problemas es el alto crecimiento de la deuda exterior, que oscila entre $1,250 y $1,500 millones, monto que, en opinión de Díaz, ``es el más alto registrado en la historia del país''.

 La deuda externa de Honduras supera los $4,000 millones.

 Lo más delicado para Honduras, agregó Díaz, es que a partir de marzo se vence la moratoria que han dado algunos de los países del Club de París, y habrá que
 comenzar a pagar entre $140 y $160 millones, adicionales a los más de $350 millones que se abonan actualmente por concepto de deuda externa.

 Gran parte de la nueva deuda que ha contraído Honduras está invertida en la reconstrucción del país tras el paso devastador del huracán Mitch, que a finales de 1998 destruyó el 70 por ciento de la infraestructura productiva.

 El ambiente para cualquier gobernante que salga elegido ``es de mucha dificultad económica, ya que las exportaciones también disminuyeron en términos de valor, no tanto en volumen'', subrayó el coordinador del FOSDEH.

 Honduras ha sentido este año los efectos de la drástica caída de precios del café en el mercado internacional.

 El café ha sido en los últimos años el primer producto de exportación de Honduras, seguido del banano, fruta que si bien podría exportar unos 25 millones de cajas de 18 kilos, representará un ingreso de apenas unos $150 millones.

 El turismo, que también ha tenido un repunte en los últimos años, ``estará en situación crítica'', advirtió Díaz.

 Una de las pocas esperanzas de este país centroamericano sigue siendo las remesas de dólares que envían unos 300,000 hondureños que viven en Estados Unidos, que podrían alcanzar los $550 millones, según otras fuentes.