El Nuevo Herald
24 de noviembre de 1998

 Nombrado Carlos Castañeda editor de El Nuevo Herald

 MARCO TULIO PAEZ
 Especial para El Nuevo Herald

 Carlos Castañeda ha sido nombrado editor y director de El Nuevo
 Herald, anunció el lunes Alberto Ibargüen, editor de The Miami Herald,
 en una nutrida sala de redacción del diario en español.

 Periodista cubano, veterano de 1,000 ediciones, Castañeda es conocido
 por su pasión por el periodismo, y dijo que asumía su nueva
 responsabilidad con el mismo entusiasmo que sentía desde los nueve
 años de edad, cuando descubrió su vocación escuchando las
 transmisiones deportivas de la radio en su Habana natal.

 ``Desde aquella época se decía que los periódicos iban a desaparecer
 ante el embate de la radio y luego de la televisión, como ahora con la
 Internet, el nuevo demonio con que tratan de espantar a la palabra
 impresa'', dijo en su primera visita oficial al periódico. ``Pero el
 periodismo tradicional en papel está muy lejos de morir, siempre y
 cuando no mate al lector de aburrimiento. Allí esta la clave''.

 Hasta ayer, Castañeda pasó cerca de 25 años como editor de El Nuevo
 Día, el principal periódico de Puerto Rico. Durante ese tiempo renovó
 sus operaciones editoriales y financieras, haciendo que el diario
 aumentara su circulación de 16,000 a más de 120,000 copias.

 Los ingresos también se incrementaron dramáticamente. También sirvió
 como consultor para más de 25 periódicos a lo largo de América Latina.

 Castañeda dijo estar convencido de la vocación internacional de El
 Nuevo Herald, al cual prometió convertir en el diario más importante del
 continente americano. ``Debe ser material de consulta indispensable en
 todos los centros de decisión de la región'', dijo.

 Castañeda debutó en el periodismo en Cuba en 1948 como comentarista
 deportivo, con un programa radial propio que se llamaba La Voz del
 Aire. Tenía apenas 16 años.

 En la actualidad es miembro de la Sociedad Americana de Directores de
 Periódicos, la Sociedad de Diseños de Periódicos y la Asociación
 Interamericana de Prensa, donde ha servido como vicepresidente del
 Comité para la Libertad de Prensa.

 En diciembre asumirá las labores de editor y director de El Nuevo
 Herald, respondiendo en ese cargo directamente a Alberto Ibargüen,
 editor de The Miami Herald.

 Al anunciar su nombramiento, Ibargüen tuvo hacia él los mayores
 elogios. ``Castañeda es un periodista de la más alta estatura
 internacional'', dijo. ``Confío y espero en que llevará El Nuevo Herald a
 una posición de liderazgo en Miami y en el hemisferio''.

 Agradeciendo su nombramiento, Castañeda advirtió a todo el personal
 de El Nuevo Herald que era un amante de la excelencia, cuyo valor
 había aprendido muy bien desde su corta edad en sus días de escuela
 con los Hermanos Cristianos de La Salle.

 ``Los cambios serán evidentes a partir del 10 de enero del próximo año
 e incluirán todos los aspectos del diario, desde su diseño, hasta la
 manera de presentar las historias. Menos política y más deportes, que
 son la pasión latinoamericana. Salud, educación, vida en pareja, hijos
 serán tópicos repotenciados en esta nueva era que se inicia el año
 próximo'', aseguró.

 Castañeda es diplomado en periodismo de la Universidad de La Habana
 y también asistió a la Escuela de Periodismo de la Universidad de
 Missouri.

 Comenzó su carrera en La Habana como redactor de deportes y
 comentarista radial, pasando luego a la televisión como editor de noticias
 y presentador de deportes.

 Trabajó como redactor de deportes y editor de diseños de páginas en el
 periódico El Mundo, y más tarde fue reportero especial para la popular
 revista cubana Bohemia.

 El 15 de julio de 1960, con $50 en el bolsillo, Castañeda y su familia
 emigraron a Nueva York, donde trabajó como director y corresponsal
 de Bohemia Libre, y luego como su corresponsal en Washington para la
 Casa Blanca y el Departamento de Estado.

 Trabajó para Life en Español como corresponsal, reportero y editor.

 Castañeda y su esposa, Lillian, tienen cuatro hijos y seis nietos, y durante
 mucho tiempo han tenido sus residencias en Puerto Rico y Miami.