MARCOS ALEMAN / AP
SAN SALVADOR

Francisco Flores, un ex profesor de filosofía que pasó varios años en la India
estudiando, asumirá hoy, martes, la presidencia de El Salvador. Se presenta
como un hombre conciliador que promete una nueva forma de hacer política y
que hará un gobierno de cambio ordenado.

De 39 años, apareció en el escenario político en las elecciones de 1994,
desempeñó varios puestos sin importancia en los gobiernos de la Alianza
Revolucionaria Nacionalista (Arena) hasta convertirse en presidente del Congreso
unicameral.

Estudió en universidades de Estados Unidos, graduándose en filosofía, ciencias
políticas, historia y literatura. Cuando estuvo en Harvard decidió irse a la India en
busca de una perspectiva filosófica distinta.

Vivió tres años en un monasterio de Sai Baba, en el sur de la India y en otro del
maestro Aurobinda. Asegura que encontró la dimensión espiritual de su propia
cultura, que hasta entonces no había descubierto.

Flores llega a la presidencia tras un contundente triunfo en una primera ronda
electoral sobre otros seis candidatos, entre ellos Facundo Guardado, del ex
guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).

Recibe de su antecesor, Armando Calderón Sol, un país que ha consolidado la
paz y la democracia, y ha establecido las bases de un proceso de desarrollo
político, económico y social.

El nuevo mandatario y el vicepresidente electo, Carlos Quintanilla, de 52 años,
han prometido una ofensiva frontal contra la delincuencia.

Su gabinete tiene una edad promedio de 43 años y está constituido por
profesionales con maestrías y postgrados obtenidos en el extranjero.

Flores se presentó como parte de una nueva generación política que quiere dejar
atrás los agrios señalamientos contra Arena, cuyo himno oficial dice que ``El
Salvador será la tumba donde los `rojos' terminarán, salvándose así la América'',
en alusión a los ex guerrilleros marxistas.

En este país de 5.5 millones de habitantes todavía están vigentes los viejos
odios y sospechas, transcurridos sólo siete años del fin de la guerra civil donde
más de 76,000 personas murieron a manos de soldados, guerrilleros y
escuadrones derechistas.

Flores divide su plan de gobierno en alianzas: por el trabajo, la solidaridad. La
seguridad y el futuro. Su programa ha sido duramente criticado por los analistas
que dicen que ``ofrece todo y nada''.

``Es un plan totalmente plano con 40 prioridades, pero donde nada es prioritario'',
dice al analista Héctor Dada Hirezi.

Flores es criticado también por la manera en que se presenta, la que algunos
consideran artificial y ``como producto de consumo''.

``Francisco Flores es producto del marketing, es una hechura (...) Yo no veo en
él al líder, ni para dentro del partido, ni para afuera'', señala el economista y
analista Alberto Arene. ``Es un hombre conciliador pero que no tiene base de
poder y sustentación propia que le permita imponer su línea sobre los poderes
fácticos del partido'', afirma Arene.