Reuters
LA HABANA

El periodista independiente cubano Manuel Antonio González Castellanos fue
liberado después de cumplir más de dos años de prisión por un delito de
``desacato'', informaron ayer fuentes disidentes.

``Lo liberaron el 26 de febrero por cumplimiento virtual de condena'', indicó
Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y
Reconciliación Nacional, que monitorea la situación de los presos en la isla.

González, un periodista independiente que trabajaba para la agencia Cuba
Press, fue detenido en octubre de 1998 y condenado a dos años y siete meses
de cárcel, según Sánchez.

``Fue acusado de desacato por expresiones que se consideraron irrespetuosas
hacia el jefe de Estado'', añadió.

Las autoridades cubanas, que sólo permiten la existencia de medios de
comunicación oficiales no comentaron la liberación de González.

Los periodistas independientes de la isla envían sus crónicas al exterior por
teléfono, en un intento por romper el monopolio informativo oficial.

Todos ellos, al igual que los disidentes políticos, son considerados por el
gobierno contrarrevolucionarios financiados por Estados Unidos.

Por su parte, la organización Reporteros sin Fronteras, que trabaja a favor de la
libertad de expresión en el mundo, mostró su satisfacción por la liberación de
González, pero recordó que no debería haber sido encarcelado.

La organización no gubernamental pidió ayer al gobierno cubano la liberación de
Bernardo Arévalo Padrón, el último periodista que sigue preso en la isla.

Arévalo Padrón, fundador de la agencia Línea Sur Press, fue condenado a seis
años de cárcel en noviembre de 1997 por desacato al gobernante Fidel Castro.

El periodista puede ``teóricamente'' gozar de libertad condicional tras haber
cumplido la mitad de su pena, recordó Reporteros sin Fronteras.

``En Cuba, donde la Constitución establece que la libertad de prensa tiene que
ser `conforme a los objetivos de la sociedad socialista', la única prensa
autorizada es la oficial'', indicó la organización.

Además, Reporteros sin Fronteras denunció las presiones a las que están
sometidos en Cuba ``los aproximadamente cien periodistas independientes
agrupados en unas veinte agencias'', lo que obligó a 18 reporteros a exiliarse el
año pasado.