VIVIAN SEQUERA / AP
                      LA HABANA

                      El gobernante cubano Fidel Castro y el líder de la derecha chilena y alcalde de Santiago de Chile,
                      Joaquín Lavín, parecieron dejar de lado esta tarde sus diferencias ideológicas y por cerca de tres horas
                      discutieron, pero no de política, sino de planes sociales.

                      ''Nosotros somos gente civilizada. Uno no puede escoger a la gente porque tenga una ideología, un
                      pensamiento diferente, somos un país civilizado'', declaró Castro.

                      Lavin, quien llegó el lunes a Cuba en visita de cuatro días, agregó que ``las diferencias políticas
                      existen, pero hemos comprobado que en un máximo respeto se puede conversar''.

                      Ambos dirigentes hablaron con periodistas tras asistir juntos a un encuentro con estudiantes de la
                      Escuela de Trabajadores Sociales, en Cojímar, a las afueras de La Habana.

                      Lavín, según reportó la agencia EFE, declaró que ``no me voy a transformar en comunista por venir a
                      Cuba, pero sí decir que hay que discrepar respetuosamente''.

                      En declaraciones a la prensa local, Lavín también aseguró que mantiene un diálogo ''franco y cordial''
                      con las autoridades cubanas sobre temas de interés bilateral.

                      Señaló que el objetivo principal de su viaje a la isla es conocer la experiencia cubana con el plan del
                      médico de la familia, un programa dedicado a la atención comunitaria.

                      Castro, por su parte, indicó que tenía previsto otro encuentro, esta vez privado, con Lavín, pero no
                      ofreció detalles.

                      ''Lo mejor con todos estos temas es manejarlos con discreción. Yo lo único que les digo es que todos
                      estos temas han sido esclarecidos'', afirmó Castro, interrogado sobre las versiones de un supuesto
                      apoyo cubano a grupos insurgentes chilenos, resurgidos este año con un secuestro en Brasil.

                      Entre Santiago y La Habana ''no habrá dificultades de ninguna índole entre Chile y Cuba porque no
                      existe ninguna base objetiva'', indicó Castro.

                      Lavín también ha dicho que busca conversar con las autoridades cubanas sobre el grupo izquierdista
                      chileno Frente Patriótico Manuel Rodríguez.