Granma Diario
Febrero 7, 2002

Cuba-Japón 100 años después

                    ARNALDO MUSA

                    Recuerdo hace cuatro años cuando en Cuba se celebró el
                    centenario de la llegada del primer inmigrante japonés, y con ello se
                    homenajeó a todos aquellos que se insertaron en nuestra
                    nacionalidad y ofrecieron los mejores valores que caracterizan a
                    ese pueblo: laboriosidad, tenacidad, sencillez, sensibilidad y lealtad,

                    En este 2002, también 100 años después, ambas naciones
                    conmemorarán el establecimiento de sus relaciones diplomáticas
                    en 1902, hasta que en 1941, al declararse la guerra a ese país
                    asiático por su participación en el eje fascista, se interrumpen para
                    reabrirse en 1951, con la firma del Tratado de San Francisco.

                    Pero es a partir del triunfo revolucionario cubano en 1959 cuando
                    los vínculos se desarrollaron notablemente, teniendo como
                    componente principal el intercambio comercial. Durante muchos
                    años, Japón fue uno de los principales socios comerciales de Cuba
                    en el área de moneda libremente convertible.

                    En 1998 se firmaron los Acuerdos bilaterales de reprogramación de
                    la deuda con las empresas comerciales miembros de la
                    Conferencia Económica Japón-Cuba, lo que fue un paso de avance
                    para el pago de la deuda cubana y creaba condiciones en Cuba
                    para el desarrollo del comercio.

                    En el 2000 se firmó un acuerdo en el que ambas partes mostraron
                    buena voluntad política para la renegociación de la deuda a corto
                    plazo, y en los últimos tiempos se han logrado avances al efecto,
                    así como en la cooperación, que se ha evidenciado en el flujo cada
                    vez mayor de turistas japoneses, y donativos nipones a programas
                    sociales cubanos.

                    La profundización en el diálogo político ha contribuido a los avances
                    en lo económico. En este contexto cabe destacar la visita de
                    nuestro Comandante en Jefe en diciembre de 1995 al archipiélago
                    nipón y la alta valoración del gobierno de Tokio a la mediación de
                    Cuba durante la crisis de los rehenes en la residencia del
                    Embajador japonés en Lima.

                    Asimismo, el gobierno de Japón ha votado desde 1997 a favor de la
                    resolución contra el cruel bloqueo económico, financiero y
                    comercial que Estados Unidos impone a nuestro país, y aunque no
                    ha pasado lo mismo en otras instancias, Cuba no ve en ello
                    obstáculo alguno para las relaciones.

                    En este contexto, con agrado, se recordará el primer centenario del
                    establecimiento oficial de los vínculos diplomáticos.