JAVIER BAENA / AP
BOGOTA

Agobiados por la violencia y la crisis económica, los colombianos están saliendo
del país en busca de mejores horizontes a un ritmo sin precedentes: 3.3
millones están radicados en el exterior.

El éxodo se intensificó en los últimos ocho años, pues mientras en 1992 había
1.9 millones de colombianos en el exterior, al concluir el 2000 la cifra se elevó a
3.3 millones, dice un estudio de la Asociación Nacional de Instituciones
Financieras (ANIF) divulgado ayer.

Estas cifras indican que el 7.8 por ciento de la población colombiana --casi 40
millones el año pasado-- vive en el exterior, especialmente en Estados Unidos,
Venezuela y Ecuador, dice el estudio.

El éxodo mayor se registró entre 1996 y 2000, pues según los registros de
inmigración del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) en ese periodo
1'072,449 colombianos salieron definitivamente del país.

La ANIF dice que éste es ``el período de la gran crisis nacional, la que
corresponde a la crisis política, el aumento del desempleo, el disparo del
secuestro, la parálisis económica, el crecimiento acelerado de la guerrilla y el
paramilitarismo y el auge de la siembra de coca y amapola''.

``En estos años, en síntesis, se ha ido un grupo de personas semejante al que
vive en Barranquilla, la cuarta ciudad de Colombia'', afirma el estudio de la ANIF.

Agrega que el éxodo tiene graves repercusiones en el país por la salida de
profesionales y obra de mano calificada, capitales y recursos financieros y el
cierre de empresas y de fuentes de trabajo.

``La emigración es una válvula de escape para un país convulsionado que por
ahora no ofrece --no puede ofrecer-- oportunidades económicas y sociales y,
mucho menos, estabilidad, seguridad y protección a sus ciudadanos'', dice el
informe.

Es tal la desesperación por salir del país que la semana pasada más de 200,000
jóvenes que no tienen cómo costearse una carrera universitaria, hicieron largas
filas frente al Instituto de Estudios en el Exterior para concursar por 60 becas
para estudiar medicina en Cuba.

El estudio de ANIF dice que no sólo se registra el fenómeno de la migración
externa sino de la migración interna por el desplazamiento forzoso que afecta,
según cálculos de la Organización de las Naciones Unidas, a 1.5 millones de
personas en los últimos once años.

Según el estudio, la solución al problema migratorio interno y externo está en la
reactivación de la economía, reducir el desempleo y avanzar en la búsqueda de
la paz.

Investigaciones de Planeación indican que la violencia generada por los grupos
guerrilleros y paramilitares le cuesta al país dos puntos porcentuales de su
crecimiento económico.