El Mercurio (Santiago)
Viernes 13 de febrero de 2009

Bachelet afirma que Fidel Castro "está en muy buenas condiciones" tras extenso encuentro

Luego de un sorpresivo operativo y tras ser acompañada por el Presidente de Cuba y hermano menor de Fidel, Raúl Castro, la Jefa de Estado concretó su privada cita con el ex gobernante isleño.

PATRICIO YÉVENES
Enviado especial a La Habana

"Encuentro", compuesta por Víctor Jara, se llama la canción que escuchaba la Presidenta Bachelet en la casa memorial Salvador Allende, en La Habana, cuando se le acercó el director de Protocolo, Fernando Ayala, para avisarle que el Presidente Raúl Castro la esperaba para llevarla a reunirse con Fidel Castro.

Bachelet estaba sentada en primera fila entre el embajador chileno en Cuba, Gabriel Gaspar, y el director de la casa memorial, Carlos Ayres.

Al recibir la noticia, se sorprendió, dio sus excusas a Ayres y partió rápidamente detrás de Ayala y seguida por una de sus escoltas. Fue tal la emoción y la sorpresa, que Bachelet apuró el paso e incluso en instantes alcanzó a trotar. Abordó el auto en el que la esperaba Raúl Castro, y seguidos de un fuerte equipo de seguridad, dominado por miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, emprendió rumbo al sector nororiente de la isla, al reparto de Siboney.

En Siboney está una de las cinco casas por las que Fidel está transitando. Es un sector cercano a la playa y de tres grandes centros tecnológicos de salud; entre ellos, Cimex, el hospital donde se atiende Fidel. Allí residen embajadores, ejecutivos de empresas extranjeras y de importantes figuras cubanas, como los atletas Javier Sotomayor e Iván Pedroza, y del cantante Silvio Rodríguez.

Tras el encuentro de una hora y media, Bachelet aseveró que el líder revolucionario se encontraba en muy buenas condiciones y al tanto de detalles de la situación de Chile. "Él está en muy buenas condiciones, hemos conversado largo, una hora y media; como siempre, Fidel Castro se mostró muy interesado en los temas de Chile, manejando mucha información estadística, interesado por conocer el desarrollo vitivinícola, el desarrollo de nuestra economía, intercambiando experiencias de cómo ampliar las relaciones comerciales y también, sin duda, un diálogo bastante importante sobre los desafíos de la región y los que estamos viviendo los países de América Latina en el contexto de la crisis internacional", dijo, junto con calificar la cita como "muy grata, muy importante, de muy alto nivel".

Según fuentes de Gobierno, la visita se habría terminado de gestar el miércoles en la tarde, cuando la Mandataria se reunió con Raúl Castro en el Palacio de la Revolución. Allí se habría acordado que la forma de comunicación se realizaría entre el equipo de seguridad del gobierno cubano y el director de protocolo, Fernando Ayala, dejando siempre claro que la reunión con Fidel sería "en cualquier momento", sin una fecha fija.

Y la cita se comenzó a materializar en un lugar estratégico para el gobierno cubano. Porque mientras la Presidenta se encontraba en la casa memorial de Allende, Raúl Castro llegó hasta la residencia vecina, la sede de las juventudes comunistas. Para no interrumpir la actividad en la que participaba Bachelet, esperó cerca de 10 minutos para luego partir juntos al encuentro con Fidel.

Luego que la Presidenta abordara el auto de Castro, la sorpresa e incertidumbre se apoderaron del lugar. Los asesores más cercanos a Bachelet se reintegraban a sus funciones desconcertados. Paralelamente, la cantante Isabel Parra preguntaba si esperaban o continuaban con su pequeño concierto junto a "Los Tres", hasta que se confirmó el rumor que ya corría en el lugar: la Presidenta ya estaba rumbo a la residencia de Castro.

Al cierre de esta edición se esperaba tener acceso a las fotos que documentaron la cumbre entre Bachelet y Castro, que debían ser proporcionadas por las autoridades de la isla.

Tras la visita que efectuó la Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, en enero, sólo después de dos días se conocieron fotos de la cita con Fidel, algo que incluso alimentó especulaciones sobre un montaje.

Otro hecho que sorprendió ayer en esta gira, en la inauguración de la Feria del Libro de La Habana, fue la presencia en el stand chileno de los libros "Nuestros años verde olivo", de Roberto Ampuero, y "Confieso que he vivido", de Pablo Neruda, textos que habían estado censurados en la isla, según se dijo.

Rechazo al "bloqueo"

En el seminario económico empresarial Chile-Cuba, Bachelet expresó su rechazo al embargo económico y comercial que enfrenta Cuba. "Me estoy refiriendo a algo muy concreto, al bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, el cual afecta seriamente las condiciones de vida del pueblo cubano siempre, y en particular en la crisis actual", dijo.

El tributo a la familia Allende

Se emocionó, pero sin derramar lágrimas. Minutos antes de que le comunicaran que el encuentro con Fidel ya estaba acordado, Michelle Bachelet pronunció un discurso en el memorial de Salvador Allende en homenaje a los chilenos que vivieron su exilio en Cuba. "Son tantos los que cayeron en la lucha", dijo la Presidenta. Y continuó recordando a las fallecidas Laura y Beatriz Allende, hermana e hija del ex mandatario. "Nuestra querida Tati..." alcanzó a pronunciar con la voz entrecortada, mientras mencionaba a la hermana de la diputada Isabel Allende, quien se suicidara en La Habana en 1977. Y visiblemente emocionada finalizó su discurso agradeciendo al pueblo cubano su hospitalidad con los chilenos durante esa época.

Fidel y la aspiración marítima de Bolivia

Fidel Castro dedicó su habitual columna "Reflexiones" a la cita con Bachelet, a quien describió como una "prestigiosa interlocutora". En el texto, fechado ayer a las 5:12 P.M. de Cuba, y que estaba disponible en el sitio cubadebate.cu, Castro criticó a "la oligarquía chilena" que, en sus palabras, "ata" al país con una "urdiembre legal" y también mostró su apoyo a Bolivia. "Esa misma oligarquía que hace más de cien años le arrebató a Bolivia, en la guerra desatada en 1879, la costa marítima que le daba amplio acceso al Océano Pacífico. Bolivia sufrió una extraordinaria humillación histórica en aquella contienda".

Luego aludió al Presidente Evo Morales y planteó que "él no guarda rencor" sino que se ha mostrado dispuesto a una integración con Chile.

Fidel también afirmó estar convencido de que Chávez ganará el referéndum del domingo sobre su reelección indefinida y cerró la columna señalando que "de estos temas conversé con Bachelet, quien me hizo el honor de escucharme con interés, conversar cálidamente y expresar con amplitud sus ideas... Estaré siempre satisfecho de su amistosa visita".

"Él está en muy buenas condiciones, hemos conversado largo, una hora y media; como siempre, Fidel Castro se mostró muy interesado en los temas de Chile".