Los Tiempos (Bolivia)
28 de julio de 2001

Escritor arroja vino a Gary Prado

               México Efe

               El crítico de cine y escritor mexicano Alberto Hijar arrojó una
               copa de vino a la cara del embajador de Bolivia en México,
               Gary Prado, al tiempo que le increpaba "a la salud del Ché,
               asesino".

               En declaraciones a EFE, Hijar explicó que este hecho ocurrió
               anoche (jueves) en la Casa Lamm, un centro cultural de la
               capital mexicana, después de la presentación del libro
               "Plaza Cuicuilco y otros cuentos", a la que asistieron varios
               miembros del cuerpo diplomático acreditado en México,
               entre ellos el embajador boliviano.

               "Cuando lo vi venir en su silla de ruedas no me aguanté. Sin
               pensarlo agarré una copa, le arrojé el vino a la cara y le
               recordé que él había participado en la ejecución del Ché
               Guevara y de sus compañeros", explicó el crítico, de 65 años,
               autor del texto "Arte y Utopía en América Latina".

               Dijo que tras el incidente, uno de los acompañantes de
               Prado lo empujó, pero él se negó a responder porque "el
               acto respondía a una expresión de repudio político y no a un
               pleito callejero".

               El incidente molestó a numerosos asistentes, que exigieron
               respeto para Bolivia.

               Hijar explicó que, tras el altercado, se inició una discusión
               con Gary Prado, quien insistió en que él no asesinó a
               Ernesto Guevara, aunque participó en la detención "porque
               era militar y cumplía órdenes".

               Después de este escándalo, el resto de los representantes
               diplomáticos abandonaron el recinto.

               Designación resistida en México

               El nombramiento de Gary Prado como embajador en México,
               el pasado febrero, provocó una fuerte protesta entre la
               izquierda mexicana, aunque el Gobierno de Vicente Fox evitó
               pronunciarse sobre el tema.

               El 8 de octubre de 1967, un pelotón militar al mando del
               entonces capitán Gary Prado capturó al guerrillero de origen
               argentino Ernesto "Che" Guevara en el poblado boliviano de
               la Higuera.

               Guevara fue asesinado al día siguiente de su detención,
               aunque Prado, en una reciente entrevista con EFE, aseguró
               que no tuvo nada que ver en la muerte del héroe de la
               revolución cubana.

               Una "bala amiga" dejó hace años inválido a Gary Prado,
               quien rechaza la leyenda de la "maldición" que ha
               acompañado a quienes estuvieron involucrados en la
               detención y asesinato del "Che".