El Nuevo Herald
23 de junio de 1999

Los exiliados condenados sólo buscaban un cambio pacífico

Ernestino Abreu y Vicente Martínez enfrentan 26 años de cárcel

PABLO ALFONSO
El Nuevo Herald

Los exiliados cubanos Ernestino Abreu y Vicente Martínez, quienes fueron
capturados tras desembarcar el pasado año en Cuba procedentes de Miami,
querían regresar a la isla para reafirmar allí su compromiso con cambios
pacíficos y democráticos, afirmaron en Miami representantes de organizaciones
cívicas.

``Su intención no fue nunca provocar un levantamiento armado ni fueron en plan
de guerra al país'', afirmó Felipe Fontanills, presidente del Colegio Nacional de
Arquitectos de Cuba.

Abreu, de 74 años, y Martínez de 65, enfrentan una condena de 26 años de
cárcel, bajo cargos de conspirar contra la seguridad del Estado vinculados a
rebelión y falsificación de moneda.

Ambos exiliados, residentes en Miami, fueron capturados en mayo de 1998,
nueve días después de desembarcar en una playa al norte de la provincia de
Pinar del Río. Según la acusación fiscal la seguridad cubana encontró armas y
pesos cubanos convertibles falsos, en la casa de Minas de Matahambre, donde
se alojaban los exiliados.

``Pero la acusación no dice ni prueba que ellos tenían encima ni dinero ni armas
cuando fueron detenidos'', afirmó Ernesto Abreu Horta, hijo de Ernestino.

Abreu Horta, dijo que su mamá, Alicia Abreu, se encuentra en Cuba en estos
momentos para visitar a Ernestino en la prisión Combinado del Este de La
Habana, donde también está recluido Martínez.

``La acción de mi padre fue un acto simbólico para hacer valer su derecho a
regresar a su país'', subrayó Ernesto Abreu.

La fiscalía presentó sus cargos iniciales a mediados de junio y ahora el abogado
defensor Menealo Mora tiene 20 días para exponer sus alegaciones, tras los
cuales el tribunal está en disposición de señalar una fecha para el juicio, según
las normas cubanas de procesamiento penal.

Fontanills, quien es también dirigente de ``Sociedad Civil Cubana'', dijo que
Abreu era un importante dirigente de esa organización, convencido de la
necesidad de lograr cambios por métodos pacíficos en Cuba.

Sociedad Civil Cubana, agrupa a un centenar de agrupaciones profesionales y
cívicas de exiliados cubanos, que tiene entre sus propósitos ``establecer lazos
fraternales y cooperar con los sectores democráticos de la sociedad civil en
Cuba'', según una declaración de esa organización.

``Fue precisamente dentro de ese espíritu en el que Ernestino y Vicente viajaron
a Cuba'', afirmó Luis Artaud, vicepresidente de Sociedad Civil Cubana.

Por su parte Jorge Bravo, presidente del Colegio de Ingenieros Agrónomos de
Cuba en el exilio, indicó que la acción de Abreu es consecuente con sus
principios de ``reconstruir una sociedad civil en Cuba en un ambiente pacífico y
para reafirmar ese derecho desembarcó en la isla''.