El Tiempo (Colombia)
21 de febrero de 2002

Los paramilitares, primeros beneficiados con la ruptura del proceso de paz

 
                   La mejor tajada en el rompimiento del proceso de paz parecen
                   llevársela los paramilitares. Todos los analistas coinciden en que el
                   fin del proceso de paz favorece a las Autodefensas Unidas de
                   Colombia (Auc) política, estratégica y aun militarmente.

                   Ante la posible ruptura del proceso de paz en enero, Carlos
                   Castaño, líder de las Auc, prometió una guerra frontal contra las
                   Farc, que debería comenzar inmediatamente se declarara muerto el proceso de paz.

                   La primera gran ventaja que les concede a los ‘paras’ el fin de las negociaciones va
                   precisamente por esa línea: poder reclamar que tenían razón cuando clamaban que el
                   proceso era un adefesio en el cual las Farc estaban obteniendo ventajas estratégicas y a
                   cambio no concedían nada.

                   Partiendo de allí, y como aseguró en la crisis de enero el coronel (r) Carlos A. Velásquez, “las
                   Auc pueden encaminarse a crecer en el nivel de aceptabilidad de la gente como un mal menor
                   para combatir un mal mayor”.

                   Según él, eso puede redundar en la ampliación del espacio político que desde 1996 están
                   empeñados en lograr. Sin embargo, esa oportunidad de crecimiento en el plano ideológico y
                   de inserción popular también depende de una disminución drástica de los niveles de brutalidad
                   y barbarie que han utilizado hasta el momento en muchas de sus acciones militares.

                   Un factor que las va a favorecer enormemente, sobre todo en el plano estratégico, es que la
                   presión del Ejército sobre ellas debe disminuir de modo ostensible. La Fuerza Pública va a
                   estar totalmente ocupada en su enfrentamiento con la guerrilla y difícilmente va a poder
                   atender algún frente distinto de guerra.

                   El general (r) y analista político Álvaro Valencia Tovar comparte esta tesis. Sin embargo,
                   advierte que puede ser nociva para los militares: “las dificultades para operar contra las
                   autodefensas van a ser aprovechadas para acusar al Ejército de connivencia con dichas
                   organizaciones al margen de la ley”.

                   Por otra parte, la guerra total que se prevé deben desencadenar las Farc sin proceso de paz,
                   puede ayudar incluso económicamente a las autodefensas, que pueden ampliar su ‘base de
                   contribuyentes’ entre grupos cada vez mayores, y diferentes del narcotráfico habitual.

                   Además de ‘guerra total’, es muy probable que las Farc arrecien sus secuestros y extorsiones.
                   La preocupación del coronel Velásquez, en ese sentido, es que bajo el argumento de
                   proveerles seguridad, los paramilitares van a encontrar un ambiente de miedo en el que
                   puedan hacer proselitismo y conseguir nuevos tributarios.

                   Por último, militarmente las Auc quedan liberadas del tapón que implicaba la zona de despeje.
                   “Quedan con las manos mucho más sueltas”, asegura el analista y ex guerrillero León
                   Valencia. “Los veo copando territorios en el sur y colonizando sin tanta dificultad por el lado
                   del Meta”.

                   La consecuencia inmediata e inevitable, de todos modos, es un escalamiento de
                   consecuencias imprevisibles de la lucha entre ‘paras’ y guerrilla. No se puede desestimar que
                   con el fin del despeje, más de cinco mil guerrilleros que custodiaban el Caguán también
                   quedan liberados y listos para hacer contraofensivas. El año pasado, ya le demostraron a las
                   autodefensas que pueden combatirlos incluso en su retaguardia estratégica. Su ataque en el
                   nudo de Paramillo así lo reveló.