El Nuevo Herald
4 de abril de 2001

Paramilitares reclutan a oficiales destituidos

Agence France Presse
BOGOTA

Al menos 16 oficiales del Ejército colombiano, destituidos en octubre pasado
bajo cargos de violar los derechos humanos, se integraron a los grupos
paramilitares de ultraderecha y varios de ellos operan en una zona del norte del
país donde se prevé celebrar el diálogo de paz con el Ejército de Liberación
nacional (ELN), informó ayer el diario El Espectador.

También se integraron a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) tres
suboficiales igualmente destituidos en octubre, señaló el rotativo, basado en un
informe del servicio de inteligencia del Estado.

Entre los oficiales reclutados --cuyos nombres se mantienen en reserva ``por
seguridad de sus familias'', según la fuente-- figuran once capitanes y cinco
mayores.

Un responsable del servicio de inteligencia dijo al diario que las autoridades no
descartan que varios soldados regulares que desertaron o fueron expulsados del
Ejército por indisciplina, combatan actualmente en las filas de las AUC, un grupo
que cuenta con unos 8,000 efectivos y está acusado de violar gravemente los
derechos humanos y traficar con cocaína.

Ese responsable, que no fue identificado, señaló que la jefatura de las AUC
asignó a siete de los oficiales a tareas de entrenamiento de combatientes,
manejo de armas y operaciones de inteligencia en una zona norteña conocida
como Magdalena Medio, donde también operan los rebeldes del ELN y de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Las AUC libran una guerra abierta con las FARC y el ELN en diversas regiones
del país, la cual incluye ataques contra campesinos y otros civiles ajenos al
conflicto, pero que cada grupo percibe como aliado del adversario.

El gobierno ha acusado a los paramilitares y a los narcotraficantes de alentar las
protestas de los campesinos contra el ELN.