El Nuevo Herald
Sat, Feb. 07, 2004

Proceso de Castaño en España complica aún más el plan de paz

  Agence France Presse
  BOGOTA

  La decisión del juez español Baltasar Garzón de procesar al líder paramilitar colombiano Carlos Castaño complicó aún más su situación, al estar ya pedido en extradición por Estados Unidos, y planteó nuevas dudas sobre el plan de paz del gobierno y los grupos de extrema derecha.

  Garzón ordenó el jueves el procesamiento de 34 personas, entre ellas Castaño y el zar de la explotación de minas de esmeraldas de Colombia, Víctor Carranza,
  supuestamente implicados con ''clan de los mellizos'', organización de narcotráfico que intentó enviar un cargamento de droga a Europa a bordo de un buque.

  En su disposición judicial, el magistrado de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, indicó que Castaño ``colabora con la organización como un respaldo armado para solucionar cualquier tipo de conflicto con otras organizaciones de tráfico de drogas''.

  El ''clan de los mellizos'', cuyo jefes Víctor y Miguel Angel Mejía Múnera también figuran en la causa de Garzón, pretendía ingresar en Europa 14 toneladas de cocaína, de las cuales cinco debían ser cargadas a bordo del buque ''Privilege'', capturado a 400 millas de las Islas Canarias (suroeste) el 31 de agosto del 2000, sin que se encontrara nada a bordo.

  Tras conocer la decisión del juez español, Castaño envió una carta al alto comisionado de paz, Luis Carlos Restrepo, en la que niega los cargos y se dice dispuesto a retirarse de las negociaciones de paz si el gobierno colombiano considera que el caso podría afectar el proceso.

  ''Nunca he apoyado, de ninguna manera, a ningún narcotraficante en su nefasto negocio del tráfico de drogas. Soy enemigo del narcotráfico'', afirmó Castaño, jefe político de la Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), principal grupo que participa en el plan para desmovilizar a entre 16,000 y 20,000 paramilitares antes del 2006.

  El jueves, la Embajada de Colombia en España señaló que el gobierno ''se ajustará plenamente a las leyes vigentes: la Constitución colombiana y las normas del derecho internacional''. Aun el gobierno colombiano aún no había respondido si estima conveniente que Castaño se aparte de la negociación.